Un gato sabio, tomo como discípulo a un tigre para enseñarle las diferentes artes de la cacería.
El tigre creció, se hizo poderoso. Conocía ya muchas formas de ataque y defensa. Se hizo muy fuerte hasta que un día desafió a su maestro. Cuando lo hizo, el maestro lo esperó a los pies de un árbol y simplemente trepo a él.
Trepar a los árboles fue el único secreto que el gato no había enseñado al tigre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario